La Fundación Gonzalo Rodríguez culmina un programa de seguridad vial para motociclistas en Argentina
La Fundación Gonzalo Rodríguez (FGR), referente en materia de seguridad vial en Latinoamérica, culmina su programa piloto de Motoescuelas municipales, destinado a crear escuelas de conducción de motocicletas para brindar herramientas de seguridad vial a motociclistas en Argentina. El proyecto se completa luego de haber realizado programas de capacitaciones en diversos Centros de Emisión de Licencias del país, junto a la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) y certificar un conjunto de motoescuelas municipales.
A lo largo de todo 2022, la Fundación ha trabajado con las autoridades de más de 20 municipios argentinos con el objetivo principal de formarlos en la creación de motoescuelas. El criterio de selección de los municipios se llevó a cabo en conjunto con la ANSV, en un llamado abierto a las diferentes municipalidades del país que estuvieran interesadas en la propuesta
Con una excelente respuesta a la convocatoria, se postularon más más de 140 municipios y a la fecha ya se han certificado: San Fernando del Valle de Catamarca (Catamarca), Cerrito (Entre Ríos), Villa Clara (Entre Ríos), Los Altos (Catamarca), Guaymallén (Mendoza), Baradero (Buenos Aires) y Las Talitas (Tucumán), San Vicente (Buenos Aires), Oberá (Misiones), Córdoba, La Rioja (La Rioja) y Villa María (Córdoba).
La seguridad de las motocicletas es un tema creciente y crítico en América Latina. En Argentina, al igual que en otros países de la región, los motociclistas son los actores vulnerables más afectados por el tránsito. El número de motocicletas está aumentando en casi todos los países y representa ya más del 50% del parque automotor en varios de ellos.
Según registros oficiales, casi la mitad de las víctimas de siniestros de tránsito de Argentina son motociclistas, porcentaje que ha ido en aumento los últimos años. El Anuario Estadístico de la Dirección del Observatorio Vial de la ANSV señala que en Argentina la tasa de mortalidad en siniestros viales es de 12,3, cifra significativa si se tiene en cuenta que la Organización Mundial de la Salud considera que una enfermedad con una tasa mayor a 10 es una epidemia.
El problema de estos usuarios vulnerables parte inclusive desde el otorgamiento de las licencias para conducir. Conducir una motocicleta requiere habilidades técnicas -más que para conducir un auto- y los nuevos conductores deben ser entrenados en ese sentido dado que los sistemas de concesión de licencias de conducir son el punto de ingreso en el sistema de tránsito vial.
Por eso mismo, en 2019, gracias al apoyo de la Fundación UPS, la Fundación Gonzalo Rodríguez (FGR) y la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), firmaron un acuerdo para consolidar y fortalecer la colaboración para generar y actualizar las políticas públicas y reglamentarias de las prácticas de seguridad vial, con un enfoque en la movilidad segura.