Honda GLH 150 2025: Una renovación clave para el segmento urbano
La marca japonesa Honda vuelve a apostar fuerte en el segmento de entrada de gama con la renovación de la GLH 150, un modelo de la categoría Business que promete mantener su esencia práctica y económica, pero con mejoras que la posicionan como una opción moderna y segura para el usuario urbano. Este lanzamiento, programado para enero de 2025, marca el inicio de un año lleno de expectativas para la casa del ala dorada en el mercado local.
El corazón de la Honda GLH 150 2025 sigue siendo su confiable monocilíndrico de 149,2 cc, con distribución OHC y refrigeración por aire. Alimentado por inyección electrónica de combustible PGM-Fi, este motor entrega 12,2 HP a 8.000 rpm y un torque de 12,6 Nm a 6.000 rpm. Además de su rendimiento, destaca por su bajo consumo: con un tanque de 10,2 litros, esta moto puede recorrer hasta 400 kilómetros. Una virtud clave para quienes buscan un vehículo económico y rendidor en el día a día.
Una de las actualizaciones más relevantes está en su sistema de frenos, que ahora incorpora la tecnología CBS (sistema combinado de frenos). Este mecanismo distribuye la fuerza de frenada entre ambas ruedas al accionar el freno delantero, aumentando la estabilidad y la seguridad, especialmente en maniobras de emergencia. Este avance, que será obligatorio en 2025 para el segmento, convierte a la GLH 150 en una opción más atractiva para conductores principiantes y usuarios preocupados por la seguridad.
En el apartado estético, la GLH 150 2025 trae cambios significativos que la modernizan sin perder su perfil urbano. La paleta de colores se amplía con opciones inéditas, destacándose una decoración gris que le otorga un aspecto sofisticado. Además, los detalles cromados han sido reemplazados por acabados en negro, aportando un toque más contemporáneo.
Entre las novedades de diseño, sobresalen los plásticos laterales con un estilo renovado y una nueva parrilla portaobjetos más robusta y funcional. El faro delantero conserva su forma, pero se complementa con una nueva carcasa y luces intermitentes de color ámbar. En la parte trasera, el faro adopta líneas más compactas y modernas.
El tablero sigue siendo analógico, en línea con el enfoque práctico del modelo. No obstante, presenta una reorganización de los elementos y tipografías más actuales, facilitando la lectura. Este diseño, junto con la sencillez general de la moto, refuerza su carácter accesible para todo tipo de usuarios.